miércoles, 4 de febrero de 2009

Moviendo ficha


Me voy de aquí, me coloco un poco más allá parece ser el emblema de los colonos.

Mientras todo el mundo mira para Gaza, el Ministerio de Defensa Israelí, con Ehud Barak a la cabeza, establece acuerdos con las colonias ilegales y aprueba la construcción de nuevos asentamientos en Cisjordania.

Migron es una colonia construída sobre tierra privada palestina que, de acuerdo con la decisión del Tribunal, debería haber sido desmantelada antes de agosto del 2008. Sin embargo, lo que se ha decidido, haciendo caso omiso de la resolución de la justicia israelí y de las leyes internacionales, es construir un nuevo asentamiento un poquito más allá para poder dar cobijo a los colonos de Migron. Y lo mejor está aún por venir: con la intención de evitar el uso de la fuerza contra los colonos israelíes en una posible evacuación, se esperará pacientemente a que el nuevo asentamiento haya sido construído, lo que significa un mínimo de dos o tres años.

Siempre escucho que el 90% de los ciudadanos israelíes no dan un duro por los colonos y que muchos son los que opinan que ponen en peligro la seguridad de Israel, pero aún así se siguen construyendo nuevas colonias por doquier. Algo, sin embargo, me llama la atención: si antes se utilizaba el eufemismo de "expandir" los asentamientos ya construídos, ahora parece volver a hablarse de "crear nuevos" sin ningún tipo de rubor.

En Belén fue una activista israelí quien nos dió una charla sobre el expolio de tierra palestina a manos de Israel. Cuando nos dijo que el Tribunal había declarado las colonias ilegales y había urgido a su evacuación, una mueca irónica apareció en su cara: No lo harán.

Si alguien está pensando que ya existe un precedente en Gaza, debería preguntarse a dónde fueron a parar todos esos colonos: entre gritos de "Nazis" y "¿Es que no tenéis corazón?" fueron evacuados de unos asentamientos ilegales en Gaza a otros asentamientos, igual de ilegales, en Cisjordania.

Mientras, Rabbi Eliezer, un niño israelí de 11 años, va a ser deportado a Filipinas, de donde es originariamente su familia, porque su madre entró ilegalmente en el país en 1996 y eso va contra la Ley. Es más, el Ministerio de Interior ha dicho que el comité de apelación, al que la familia recurrió, no encuentra "ninguna razón humanitaria para permitirles quedarse en Israel".

A los colonos israelíes se les construyen asentamientos ilegales en tierras palestinas.

A los niños israelíes de padres inmigrantes se les deporta porque uno de sus progenitores no cumple uno de los requisitos de la ley de inmigración.

Curioso país Israel.



No hay comentarios: